Este lunes comenzó el proceso formal de entrega de la Clínica El Bosque de Cartagena a la Administradora de los Recursos del Sistema General de Seguridad Social en Salud (ADRES), tras una decisión que marca un hito en la gestión de activos del sector salud. La clínica estaba bajo la operación de la Unión Temporal Ducot desde 2014.
La restitución del inmueble obedece a una actuación administrativa de la ADRES, que concluyó el 26 de noviembre de 2024 con la declaratoria de incumplimiento grave y reiterado del contrato CN-01-132-2014, suscrito con la unión temporal conformada por Dumian Medical S.A.S. y Cosmitet Ltda. Como resultado, la entidad impuso la cláusula penal del contrato por más de $8.500 millones y ordenó la finalización del acuerdo contractual, así como la devolución inmediata del bien al Estado. “Esta decisión fue ratificada el pasado 19 de marzo”, precisó la ADRES.
La restitución de la clínica se da bajo una hoja de ruta coordinada con la Subdirección de Infraestructura en Salud del Ministerio de Salud y Protección Social y con la Central de Inversiones S.A. – CISA, que será la entidad responsable de la administración y custodia del inmueble a partir de la entrega.
Salvaguarda del derecho a la salud
Uno de los aspectos centrales del proceso es la garantía de los derechos fundamentales de los pacientes, así como la continuidad en la prestación de servicios de salud. En ese sentido, la ADRES informó que “este proceso se llevará a cabo garantizando y respetando el derecho a la salud y la vida de los pacientes, verificando que la Unión Temporal realice la correspondiente remisión de los pacientes hospitalizados (4 pacientes), a la red que le asigne la aseguradora.”
Este acompañamiento busca asegurar una transición ordenada, que no afecte la atención médica ni la integridad de los usuarios del sistema. El proceso también se enmarca en los lineamientos de vigilancia estatal sobre el uso adecuado de los recursos y la infraestructura en salud, en línea con la transformación institucional que vive el sistema sanitario colombiano.
Relevancia del caso para la gestión pública en salud
La actuación de la ADRES y el ingreso de CISA como administrador reflejan el fortalecimiento de los mecanismos de control en la gestión de clínicas y hospitales bajo esquemas de contratación. La ejecución de la cláusula penal y la recuperación del inmueble ratifican el principio de responsabilidad frente al uso de recursos públicos, especialmente cuando se trata de bienes destinados a garantizar el derecho a la salud de la población.
En un contexto de reformas y ajustes al modelo de aseguramiento, este caso se convierte en un referente de acción estatal frente a presuntos incumplimientos contractuales sostenidos, y subraya la importancia de supervisar con mayor rigor la ejecución de los convenios celebrados con entidades privadas para la operación de infraestructura pública en salud.
