
En el marco del Día Mundial del Asma, que se conmemora este 6 de mayo bajo el lema “Educación para el control del asma”, profesionales de la salud en Colombia hacen un llamado a fortalecer el proceso de diagnóstico clínico de esta enfermedad respiratoria crónica. A pesar de contar con guías técnicas actualizadas y evidencia científica consolidada, el diagnóstico del asma continúa siendo un desafío significativo, especialmente en los entornos de atención primaria donde el acceso a pruebas especializadas es limitado.
Según la Guía de Práctica Clínica (GPC) para el Diagnóstico, Tratamiento y Seguimiento del Asma en población mayor de 5 años, adoptada por el Ministerio de Salud de Colombia, “el diagnóstico del asma sigue siendo clínico en su esencia”, ya que no existe una prueba única que lo confirme de manera definitiva. Esta dependencia del juicio clínico, sumada a la variabilidad de los síntomas y la falta de recursos técnicos, incrementa el riesgo de diagnósticos erróneos o tardíos, con consecuencias para la calidad de vida de los pacientes y la eficiencia del sistema sanitario.
El juicio clínico como eje del diagnóstico
La Global Initiative for Asthma (GINA) define el asma como una enfermedad inflamatoria crónica caracterizada por síntomas respiratorios variables (sibilancias, disnea, opresión torácica y tos) y limitación variable del flujo aéreo espiratorio. Sin embargo, estos síntomas pueden ser intermitentes, y su aparición nocturna o al despertar complica el diagnóstico temprano, sobre todo en niños y adolescentes.
En Colombia, la GPC establece que “el diagnóstico debe iniciarse con una historia clínica estructurada y un examen físico orientado, en conjunto con pruebas de función pulmonar siempre que sea posible” (MinSalud, 2021).
Herramientas diagnósticas disponibles: espirometría y PEF
La prueba de función pulmonar más útil es la espirometría con prueba de broncodilatación, que permite identificar la obstrucción reversible del flujo aéreo. Según GINA, una variación del FEV1 ≥ 12% y ≥ 200 ml post-broncodilatador confirma obstrucción reversible. En Colombia, esta prueba debe realizarse idealmente en pacientes mayores de 5 años, al menos una vez al año, de acuerdo con la GPC.
Cuando no se cuenta con espirometría, el Pico de Flujo Espiratorio (PEF) ofrece una alternativa viable. Según la GPC, su variación diurna superior al 20% sugiere asma, especialmente si mejora con el tratamiento broncodilatador. No obstante, su uso es limitado por falta de estandarización y variabilidad técnica.
Pruebas terapéuticas y provocación
Ante cuadros clínicos atípicos o pruebas inconcluyentes, la GPC recomienda realizar pruebas terapéuticas con corticosteroides inhalados por 6 a 8 semanas. Si el paciente muestra mejoría clínica y funcional, se considera diagnóstico probable de asma. Esta práctica es común en atención primaria, pero puede llevar a sobrediagnóstico si no se aplica con rigurosidad.
Otra herramienta es la prueba de provocación bronquial con metacolina, indicada en pacientes con sospecha de asma y espirometría normal. Su uso está reservado a servicios especializados, según establece GINA, y se considera positiva si el FEV1 cae ≥ 20% con una dosis ≤ 8 mg/ml.
Apoyo diagnóstico adicional
Aunque no son imprescindibles, las pruebas de IgE total, eosinofilia periférica, pruebas cutáneas y fracción exhalada de óxido nítrico (FeNO) pueden aportar información valiosa, especialmente en pacientes con sospecha de asma alérgica o eosinofílica. La guía GINA 2024 señala que “los biomarcadores deben interpretarse como parte de un conjunto clínico y no de manera aislada”.
En Colombia, el acceso a FeNO y pruebas de provocación es limitado fuera de grandes centros urbanos, lo que obliga a un diagnóstico clínico funcional más riguroso.
Diagnóstico diferencial y remisión
La GPC enfatiza que en casos de ausencia de respuesta terapéutica o hallazgos clínicos discordantes, debe considerarse el diagnóstico diferencial, incluyendo:
- Disfunción de cuerdas vocales
- Bronquitis eosinofílica no asmática
- Fibrosis quística
- Infecciones recurrentes
- Malformaciones congénitas
- Cardiopatías
La remisión oportuna a neumología debe considerarse cuando haya dudas diagnósticas o dificultad para lograr control clínico.
En el marco del Día Mundial contra el Asma se ha evidenciado que el mayor reto para Colombia no es únicamente el tratamiento del asma, sino su identificación oportuna y precisa. Fortalecer las competencias clínicas, ampliar el acceso a espirometría y promover el uso racional de pruebas terapéuticas deben ser prioridades para mejorar el diagnóstico del asma en el país.