
Con 124 votos a favor y sin objeciones, la Asamblea Mundial de la Salud aprobó el primer acuerdo global para enfrentar futuras pandemias. El tratado refuerza la cooperación internacional, garantiza acceso justo a tecnologías sanitarias y fortalece el enfoque de Una Sola Salud.
La 78.ª Asamblea Mundial de la Salud culminó con la adopción de un nuevo instrumento internacional sin precedentes: el Acuerdo de la OMS sobre Pandemias, aprobado con 124 votos a favor, cero en contra y 11 abstenciones. Tras más de tres años de negociaciones, esta resolución busca cerrar las brechas de equidad, coordinación y respuesta que quedaron en evidencia durante la pandemia de COVID-19, y sentar las bases para una arquitectura sanitaria global más robusta, preventiva y justa.
El director general de la OMS, Dr. Tedros Adhanom Ghebreyesus, celebró la decisión como “una victoria para la salud pública, la ciencia y la acción multilateral”, subrayando que el mundo ahora “está mejor preparado para protegerse colectivamente frente a futuras amenazas pandémicas”.
- Intercambio rápido de datos genómicos sobre patógenos emergentes.
- Acceso equitativo a vacunas, tratamientos y pruebas diagnósticas.
- Redes logísticas globales para evitar desabastecimiento durante emergencias.
- Fortalecimiento del enfoque Una Sola Salud, que integra vigilancia humana, animal y ambiental.
- Respeto a la soberanía nacional, sin imposiciones sobre políticas internas como cuarentenas, vacunación obligatoria o restricciones de movilidad.
Uno de los componentes más innovadores será el establecimiento del sistema PABS (Pathogen Access and Benefit-Sharing), un mecanismo que permitirá el acceso inmediato a la información sobre nuevos patógenos y exigirá a las farmacéuticas que participen entregar a la OMS el 20 % de su producción total de vacunas, diagnósticos y tratamientos durante una pandemia (10 % como donación y 10 % a precio accesible).
Lecciones del COVID-19: desigualdad, acaparamiento y falta de coordinación
La pandemia de COVID-19 dejó expuestas las fallas estructurales del sistema sanitario global. A pesar de los esfuerzos multilaterales como la iniciativa COVAX, los países de ingresos bajos recibieron vacunas meses después que los países ricos. Además, el acceso a pruebas, equipos de protección personal y ventiladores mecánicos fue limitado, generando consecuencias críticas, especialmente en América Latina y África.
El Acuerdo reconoce estos errores y busca evitar que se repitan. Se establece que ningún país debe quedar rezagado por falta de acceso a tecnologías sanitarias en futuras emergencias. También se prevé la creación de un mecanismo financiero global y una Red Mundial de Cadena de Suministro y Logística, para garantizar el abastecimiento rápido y equitativo de productos esenciales.
Colombia gana capacidad de respuesta ante futuras pandemias
Para Colombia, la adopción del Acuerdo de la OMS representa una oportunidad decisiva para fortalecer su preparación sanitaria, garantizar acceso equitativo a tecnologías críticas y mejorar su capacidad de respuesta ante emergencias futuras. Durante la pandemia de COVID-19, el país experimentó retrasos en la llegada de vacunas y limitaciones en el acceso a insumos esenciales.
Este nuevo marco internacional permitirá a Colombia beneficiarse de mecanismos como el reparto equitativo de vacunas, tratamientos y diagnósticos, así como del futuro sistema financiero y logístico global que facilitará el flujo de suministros durante crisis sanitarias.
Además, el enfoque de Una Sola Salud está alineado con los avances nacionales en vigilancia epidemiológica integrada, lo que refuerza las estrategias locales para prevenir y contener brotes de origen zoonótico en territorios vulnerables. En términos prácticos, el país estará mejor posicionado para actuar con rapidez, equidad y soporte técnico internacional cuando surja una nueva amenaza pandémica.
Un proceso abierto que aún requiere ratificación
Aunque el acuerdo ya fue aprobado, su entrada en vigor aún depende de varios pasos:
- En 2025 y 2026 se negociará un anexo detallado del sistema PABS, que será presentado en la próxima Asamblea Mundial de la Salud.
- Posteriormente, el tratado deberá ser firmado y ratificado por al menos 60 Estados Miembros a través de sus parlamentos u órganos legislativos nacionales.
- Solo entonces el acuerdo tendrá efecto legal y operativo.
Además, el grupo de trabajo intergubernamental designado también avanzará en el diseño del mecanismo financiero internacional y en los criterios operativos de la red logística global.
Retos pendientes: abstenciones, dudas sobre participación y rol de la industria
Pese al consenso alcanzado, algunos países estratégicos como Irán, Israel, Rusia, Italia, Polonia y Eslovaquia se abstuvieron. Estados Unidos, por su parte, no envió delegados a la Asamblea, debido a su decisión de retirarse nuevamente de la OMS bajo la administración del presidente Donald Trump. Aunque su salida solo será efectiva en enero de 2026, su ausencia plantea desafíos a la coordinación global, considerando su liderazgo científico y económico.
Otro reto importante será lograr la participación efectiva del sector farmacéutico, cuya colaboración voluntaria es clave para que el sistema de acceso equitativo funcione. El cumplimiento del mecanismo de reparto dependerá en buena medida de acuerdos que garanticen incentivos, transparencia y cooperación.
Un pacto histórico a prueba: así se medirá el éxito del acuerdo pandémico
El Acuerdo de la OMS sobre Pandemias marca un punto de inflexión en la salud pública global. Si bien su aprobación es un paso trascendental, el verdadero impacto dependerá de su implementación efectiva, la voluntad política de los países y la cooperación del sector privado. Colombia, al igual que otras naciones de la región, tiene la oportunidad de transformar esta herramienta en una plataforma para fortalecer su soberanía sanitaria, mejorar la equidad en el acceso a tecnologías médicas y proteger a su población de futuras amenazas.
El mundo no puede repetir los errores del pasado. Este acuerdo es, en esencia, una promesa colectiva de que la próxima pandemia encontrará a la humanidad mejor preparada, más solidaria y con un sistema internacional listo para actuar.